
Benditos catálogos de juguetes
Principio de diciembre, llega Navidad, y todos los que tienen niños pequeños en casa saben lo que toca ahora: escribir la carta a los Reyes Magos y a Papá Noel. Los grandes almacenes, por supuesto, aprovechan este momento para mandar los catálogos de juguetes y bombardear a los niños con anuncios en la TV.
Es evidente, desde pequeños nos dicen cómo debemos actuar. Nos imponen los roles de género y el consumismo. Y sí, los anuncios y los catálogos siguen siendo muy sexistas, por mucho que aparezcan niños jugando con cocinitas.

¿Cómo pretendemos cambiar algo si seguimos educando a los más peques de la casa en el mismo sistema patriarcal? Y no me vale la excusa de que los niños son los que eligen los juguetes, que son ellas las que prefieren a las muñecas y ellos las piezas de construcción, porque no es cierto. No puedes ser lo que no ves, y aprendemos a través de la imitación. Entonces, si vemos que en la tele solo aparecen niñas con juguetes de bebés y que solo nuestras madres son las que limpian y se encargan de cocinar y arreglar la casa, ¿qué creéis que va a aprender una niña?
https://www.youtube.com/watch?v=w5RshYDqzzg
Sí, Nenuco, ya lo sabemos, los bebés cuánto más reales mejor, así aprendemos desde bien chiquititas que lo nuestro es cuidar.
Podría explicar y analizar los múltiples errores que comenten estos almacenes y catálogos pero el año pasado Feminista Ilustrada y Verne este lo hicieron bastante bien. A mí me gustaría saber hasta cuando seguirá siendo así…
Por mucho que luchemos diariamente por erradicar el machismo y todo el sistema que lo sostiene, si a los más peques seguimos dándole acceso a este tipo de catálogos, siguen viendo los anuncios que muestran a las niñas cuidando a bebés y preocupándose por su aspecto físico y a los niños en juegos de acción e inteligencia ¿de qué sirve? Seguirán creciendo niñas alienadas que cuando crezcan se verán más oprimidas que nunca y niños utilizando sus privilegios, creyéndose por encima, teniendo todo el poder que el patriarcado les da. ¿De qué sirve que a nuestros primos, hijos, sobrinos, alumnos les digamos que no existen las cosas de niños y niñas si el resto del mundo les grita que sí?
Solo podemos ser lo que conocemos, y las niñas y los niños todavía están muy lejos de ver un futuro sin machismo.

