Espacio seguro

Testimonio #26

Cuando era pequeña iba con mis amigas por la calle. Tendríamos 12 años y serían como las cinco de la tarde o las seis… nos dimos cuenta de que todo el rato estaba pasando una moto. Al principio no le dimos mucha importancia pero luego nos dimos cuenta de que nos estaba siguiendo…

Nos fuimos corriendo a casa e intentamos ir por calles en las que no pudiera pasar. Entonces, en una de estas veces nos encontramos al tipo de la moto parado al final de la calle y estaba masturbándose mientras nos miraba…

Corrimos despavoridas y cuando se lo contamos a nuestros padres ninguno le dio importancia. Nos sorprendemos cuando sucede lo peor, pero lo cierto es que a nadie le importa que nos acosen hasta que pasa algo más.

Anónima

Recomendación violeta: Porque nosotras no queremos ser valientes, queremos ser libres. Para caminar sola por la calle, para vestir como quiera, para que mis amigas y yo dejemos de preguntarnos si llegamos sanas y salvas a casa cada vez que salimos, por si un hombre me hace algo por la calle – Artículo Los hombres que piropeaban a las mujeres

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *